Un día en Andorra

Luego de una noche de fiesta… ¿¿¿¿Qué mejor que irse a otro país a esquiar????, sin mucho pensarlo y aprovechando la nevada de los días previos, un grupo organizamos una escapada de 1 día a Andorra desde Barcelona

Viajando a Andorra por un día

Mi primera experiencia con la nieve

Andorra suele ser un paraíso para los amantes del ski, de hecho su capital, Andorra la Vella, estaba a llena de turistas españoles como extranjeros, los cuales estaban a aprovechando el buen estado de las pistas, a pesar de estar casi a las puertas de Marzo

A las 5 de la mañana iniciamos camino desde Barcelona centro, de manera de llegar a la zona de esquí lo antes posible

En su momento, pregunté si alguien tenía lentillas de sobra… pero no, y claro, hacer esquí con gafas no lo acababa de ver muy claro, entonces ¿qué hice?

USÉ LENTILLAS USADAS DE UN AMIGO….si, créanlo o no, mi credibilidad como optometrista se acaba de ir a la mierda. Después de dormir 1 hora, al despertar ya estábamos en el meollo, en la zona cero, listos para empezar a deslizarnos por la nieve.

Mi primera experiencia con la nieve

Nada mas llegar fuimos a la tienda para pillar el forfait, dudamos entre snowboard o ski, pero se acabó optando por la primera opción, en parte por ser la opción que menos controlaba el resto del grupo y así yo no me sentía tan inútil.
«Goofy o Normal» me dice el dependiente… mi cara de ¿? se distingue a kilómetros, y luego de hacerme subir /bajar de una escalera me dice que soy Goofy, con pie izquierdo dominante.

Empezamos la aventura… y debo reconocer que me gustó mucho, a pesar de pasar más tiempo en el suelo que encima de la tabla, pero bueno, eso fue lo de menos. La gente me arropó y me hizo sentir menos inútil para el snow, aunque cuando a mi lado pasaba un niño de 4 años a velocidad crucero…mi moral caía por los suelos, pero a su vez me hizo plantearme que ese fue sólo el comienzo y ya sólo quedaba coger más experiencia con la nieve. Lamentablemente a día de hoy no he podido volver a esas andaduras.

Para los que están en Cataluña, hacer una escapada y esquiar en Andorra es algo que tienen muy fácil, tanto para un viaje por el día como hicimos nosotros, como para un fin de semana o escapada más larga ya que las ofertas de hoteles en Andorra es amplísima, y el turismo en Andorra es importante no sólo en invierno.

Cuando colgué la tabla y dije «prou» ya les di el tiempo a los 3 para que los demás esquiaran a sus anchas y no preocuparse del «negao» de turno, así hasta las 5pm, hora en la que fuimos casi los que cerramos las pistas ya que todo el mundo se había ido ya para sus casas

Comimos como cerdos…el esfuerzo físico nos pasó factura a esas horas que serían las 5 de la tarde.

Sobre las 6 ya nos devolvimos, más zombies que cuando subimos, y comenzó la travesía donde amablemente y sacrificadamente, el conductor nos dejó a cada uno en la puerta de casa. De haber tenido más tiempo y dinero, habernos ido al SPA en Caldea hubiera sido perfecto, pero bueno, de deja para otra oportunidad.

A pesar de los morados, a pesar de mi neumotorax diagnosticado al día siguiente, del dinero invertido (que no es lo mismo que gastado) y de el palizón del viaje, fue una escapada totalmente aprovechada y disfrutado y repetible, sobretodo por ser con gente que ha sido un 10 conmigo a pesar de sólo conocernos desde el viaje a Túnez.

Espero para la próxima dar un poco más la talla y no caerme….tanto….