Hace un año me animé a conocer Israel, ya que siempre me había dado curiosidad; sobretodo por su historia tan antigua, la cual había escuchado sobretodo en mis primeros años de colegio al estar en un colegio de curas y vivir en una familia católica. A la vez, con cierto respeto y distancia por la situación política que mantiene hace tantos años. Israel se ponía delante de mí con la primera pregunta: Qué ver y qué hacer en Tel-Aviv
Viajar a Tel-Aviv
Si quieres viajar a Israel, lo tradicional es entrar por Tel-Aviv. Aquí os dejo mi experiencia de cómo fue mi paso tanto de entrada como de salida del aeropuerto de Ben Jurion
La llegada a Tel-Aviv es fácil desde el aeropuerto cogiendo un tren que te deja prácticamente en el centro de la ciudad.
Me alojé en Abraham’s Hostel por lo que mi parada en Ha Hagana fue la más adecuada para llegar al hostel dando un paseo y tomando mis primeros contactos con la ciudad.
Descubriendo Tel-Aviv
Reconozco que apenas noté diferencias entre Tel-Aiv con una ciudad europea, de hecho, creo que lo único que me llamaba la atención era ver algún judío-ortodoxo con sus rizos, sombreros y ropas típicas, pero sobretodo la cantidad de militares en la calle, en las terrazas, en el metro, en los buses…
Ya luego te acostumbras, pero ir en vagones donde eran más los militares con sus metralletas que los civiles, te chocaba.
Las playas de Tel-Aviv
Tras dejar mis cosas en el alojamiento, mi primera parada, y debo confesar que casi la única durante mis días en la ciudad fue la playa, y si bien no soy mucho de ello, el ambiente que hay por toda la costa merece mucho la pena.
Las playas son aguas claras, y su costa es tan extensa que no sientes agobio en ningún momento.
Ruta por Jaffa
Otra zona que tiene mucho que ver y hacer cercana a Tel-Aviv es Jaffa, un coqueto rincón de calles empinadas y adoquinadas desde donde se tienen quizás las mejores fotos de la costa de Tel-Aviv
Hacer una escapada al Mar Muerto y Massada
Si quieres escapar de la playa, otra opcion que tiene mucho que ver y hacer, cercana a Tel-Aviv es contratar alguna excursión que te lleve por la mañana a Massada y luego a los oasis alrededor del Mar Muerto. Ambos totalmente visitables en una ruta de 1 día completo.
Massada es una fortaleza en lo alto de una montaña donde aún quedan restos de esa construcción. Su atractivo principal es ver el amanecer y observar el desierto desde lo alto.
Flotar en el Mar Muerto es una experiencia curiosa, pero tampoco es para echar el día, ya que la temperatura ambiente y del agua son desagradables, y la sal del agua además hace que en breve la piel se te ponga muy tirante.
Luego del barro se queda muy suave, sí, pero no hay que abusar.
Recorrer sus mercados tradicionales
En todas las ciudades hay mercados populares donde vivir el ajetreo de la vida cotidiana; ya sea con sus comidas, bebidas, artesanías y otros objetos menos auténticos, pero todo bajo un ritmo frenético. En Tel-Aviv está el mercado de ShukHa Carmel
Escápate a Jerusalem
A poco más de 1 hora llegas a la ciudad santa de Jerusalém, a la cual necesitas dedicarle tiempo, sobretodo si haces ruta por los sitios sagrados.
El control para el Dome of the Rock puede ser muy lento, y si en el Muro de las Lamentaciones como en la Iglesia del Santo Sepulcro quieres ir con tranquilidad, necesitas sobretodo paciencia.
Muchas empresas, ofrecen el shuttle bus aunque no seas huésped, por lo que es bastante fácil el ir y volver desde y hacia Tel-Aviv.
Tel-Aviv es una ciudad viva y europea, de hecho su GayPride es muy conocido y demandado, además, si nada cambia, será la sede el próximo festival de Eurovisión 2019, por lo que el ocio y la fiesta la tienes asegurada, pero realmente es así todo el año.
Tel-Aviv es un oasis (en todos los sentidos) en medio de todo Israel
'Qué hacer y ver en Tel-Aviv' have 3 comments
14 de octubre de 2018 @ 11:11 PM Rocio Tizon
Tengo muchísimas ganas de ir a Israel! Ya tenía ganas antes, pero leyéndote aún tengo más!! A veces creo que no me llega la vida! 😉
14 de octubre de 2018 @ 9:13 PM dondetemetes
Gracias Rocío
Es verdad que el viaje tuvo luces y sombras… Salvo Nazareth, telaviv y Jerusalén, el resto del país no me acabo de enamorar… Creo que sí lo mezclas con Jordania lo disfrutas más.
25 de noviembre de 2018 @ 2:40 PM pasaportesindestino
Está en mi lista, a ver si el 2019 es el año