Mi primera vez en Copenhague

Este post corresponde a la saga «Interrail 2009» que podéis seguir en la barra superior de la web

Disculpad la forma y el contenido del post ya que fue hecho antes de pensar tener una web de viajes.

::: DIA 7 :::
Nos pasamos 1 hora fuera de la consigna…estábamos un poco en shock, podríamos habernos ido a Reepenbahn a darlo todo pero claro, ya todas las conexiones futuras que tenía las perdía porque llegaría tarde a cogerlas…

De repente… la luz

Bueno…mejor dicho…uno de los trabajadores de la oficina que se había dejado no se qué dentro y tuvo que entrar. Nosotros saltando de alegría y a la vez diciéndole de las maletas que aquí allá aquí allá…era tal el entusiasmo que el tipo no nos entendía ni a la de 3, entonces nos calmamos y le dijimos qué había pasado; le entregamos el resguardo y nos trajo las maletas.

Con nuestras maletas ya nos fuimos al andén, donde eliminé mi primer artilugio, la esterilla del saco de dormir que más que ayuda estorba, así que ahí se quedó, y aprovechamos de meternos en una sala cerrada para esperar el tren, donde había una pareja joven al parecer cristianos muy férreos ya que me llamaba la atención la pose del tipo al rezar, y que le leía a la novia la biblia en no se qué idioma…

Al rato llegaron unos chavales a esperar el mismo tren, pero viendo una peli con su portatil.

Creo que aquí mi cuerpo comprendió que «duermes o mueres» y comencé a sobarme con facilidad, hasta que pasadas las 0200 me fui a dar una vuelta por la estación, y seguir en la dimensión desconocida hasta que el tren llegó….

Nos subimos sin darnos cuenta que era el vagón de 1º clase, pero ni se enteraron, así que ahí nos quedamos hasta que todos nos sobamos y despertamos por gracia divina a las 0430 en Neumunster, para la conexión siguiente…sino malo, porque el tren seguía hasta no se dónde

a las 0500 llegó el siguiente tren, en la espera me fui a una maquina expendedora donde habían tabletas de chocolate con almendras por 0,60€ así que me pillé una para las noches de necesidad

El tren era de estos vagones cerrados, donde había una señora que ya se iba y un italiano. caímos rendidos en cero coma hasta llegar a Copenhague a las 0930 de la mañana

Al llegar, Julia me confiesa «interrail no es para mi» y después del episodio en Amsterdam, me dice que esto es suficiente y confirma que se regresa; a ella no le motivaba la idea de ir a escandinava, así que , como hicimos antes del viaje, buscamos conexión Copenhague-Bruselas, y que ella siguiera ruta por el sur, así que nada más llegar, fuimos a buscar su ruta: 1850pm, tren a Bruselas vía Colonia.

Yo no busqué mi conexión siguiente porque había mucha gente y me agobié; queríamos estirar las piernas.

Nada mas salir te encuentras con el Parque Tivoli, un gran parque de atracciones y a su lado la oficina de información, donde los planos eran gratis y tiramos por la catedral, la plaza central, la biblioteca, la universidad, el museo de diseño, el de arte, y comenzamos a cruzar algunos de los parques hasta llegar a la típica imagen de las casitas de colores al rededor del río.

Ahí llamé a mi ejecutivo de banco nuevamente para saber por qué no pude usar la tarjeta…»No visa…solo Banco de Dinamarca»…¡¡¡¡¿¿¿¿PERO QUÉ ES ESTO????!!!! así que nada, mosqueadísimo le dejé un mensaje poco amigable en su buzón y me senté a las orilla a refunfuñar….Julia compró unos bocatas que me los comí con 0% ganas…pero bueno… sin comer tampoco iba a arreglar nada

Nos fuimos a los jardines de palacio y finalmente nos pusimos en marcha hacia La Sirenita…que decepciona un poco como el niño meon de Bruselas….pero bueno…no se, me la imaginaba más grande, o puesta en algún sitio más destacado, pero entre que estaba a reventar de gente, y que estaba lleno de tiendas de souvenirs y carritos con helados y tal… la estatua se perdía entre la masa.

Comenzamos el camino de vuelta para llegar pasadas las 1730 a la estación, Julia se duchó y yo también, esperamos a que llegara su tren y despedirnos…(esperaba que llegara viva de vuelta a España)

Después de irse, me voy a la oficina de ventas: ERRRRRORRRRRRRRR!!!!!!!!,

La 1º señora me dice: todo lleno, sin dar pie a chistar

salgo, vuelvo a entrar a los 5 minutos y otra mujer, más maja, me dice que no hay nada hasta la mañana del día siguiente pero igualmente llegaría tarde a Oslo para la conexión que ya tenía reservada…

Me empece a agobiar, ademas que ya estaba solo…no tenía con quién discutir…

Entonces….antes de tirar la toalla, fui una tercera vez: «me da igual la hora, las paradas, necesito llegar a OSLO»…… el tipo escribía y cliqueaba en su ordenador….hasta me que dice: «te va bien llegar a Oslo a las 1400?»

SIIIIIIIIIIIII!!!!!!!!

Pues aquí tienes una conexión: salía a las 0400 y eran menos de las 2000…la que me esperaba!

Me senté un rato, pregunté si a la noche podía esperar el tren dentro de la estacion y me fui por la otra salida a seguir el camino del rio, cruzar los puentes que hay en Copenhague, hasta llegar a la Opera luego de pasar por muchas terracitas bastante pijas, y finalmente llegue a la misma zona de las casitas de colores, pero de noche….molaban aún más.

Sobre las 2300 volví a la estación y me fui a Internet…(muchas estaciones de Europa tiene zonas de ordenadores que funcionan con un ticket y password que mucha gente deja tirado porque se aburre, o porque comprar más tiempo del que necesitan y lo deja tirado para irse al tren, así que no hace falta que compres para poder conectarte, de hecho a mí una señora me dejó más de media hora por la cara.

Pasadas las 0030 me fui a la estación nuevamente y se me acercaron 2 chicos, preguntándome lo mismo, si la estación cerraba, y sí cierra, de 0200 a 0430 por limpieza, así que si tienes conexión entre esas horas, te vas a los andenes a esperar…y así lo hice, sin poder dormir, porque el tren casi no hacia ruido al llegar, y seguro que se me pasaría de largo…y ahí sí que ya me pegaría un tiro